Un libro reproduce una carta de Pierre de Coubertin a Hitler
Sábado, 18 Mayo 2024.
Escrito por AFP
Pierre de Coubertin, que tenía 73 años en el momento de los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936, no asistió.
Una carta de Pierre de Coubertin, el promotor de los Juegos Olímpicos modernos, dirigida a Adolf Hitler en 1937 aparece reproducida en un libro publicado este viernes que demuestra, según el autor de la obra, la presencia de "bastantes vínculos entre los dos hombres".
Una copia de la carta aparece en 'Pierre de Coubertin, l'homme qui n'inventa pas les Jeux olympiques' (Pierre de Coubertin, el hombre que no inventa los Juegos Olímpicos), del periodista Aymeric Mantoux.
Esa misiva no había visto la luz nunca en una publicación francesa. Procede de los archivos del Tercer Reich, donde dio con ella el historiador alemán Hans Joachim Teichler.
"Es un investigador que analizó toda la historia de los deportes en Alemania en el siglo XX. Encontró esta carta que demuestra que, al contrario de lo que dicen la familia de Coubertin y el COI [Comité Olímpico Internacional], existían bastantes vínculos entre los dos hombres", explicó Mantoux a la AFP.
Con fecha del 17 de marzo de 1937, la carta agradece al régimen alemán su contribución a su "año jubilar", los 50 años de su acción de promoción del deporte.
Historiadores han seguido el rastro de pagos de la Alemania nazi a un fondo de dotación creado por Pierre de Coubertin para proseguir con su acción. Y el Tercer Reich se preparaba para abrir en Berlín un 'Instituto Internacional Olímpico'.
Pierre de Coubertin, que tenía 73 años en el momento de los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936, no asistió.
"No sabemos la razón. Los Juegos de Berlín son sin embargo el apogeo de lo que él quería hacer", apunta el autor de esta biografía crítica.
Durante la ceremonia de inauguración, sin la presencia del francés en el estadio, los organizadores difundieron su voz por medio de altavoces.
Son conocidas las opiniones muy conservadoras de Coubertin. Se negaba a la profesionalización del deporte, así como a la participación de las mujeres, y creía en la "esencia superior" de la "raza blanca".
"No creo que abrazase la ideología nazi de la erradicación de los enemigos de la raza aria", subraya Aymeric Mantoux. "Pero entre su visión y la del Tercer Reich se encuentran puntos comunes en torno a la voluntad de redinamizar una nación por el deporte".
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