Autoridades colocan alianzas púbico- privadas como única salida en busca de mejor infraestructura vial

“Es una oportunidad país, para convertir el Consejo Nacional de Concesiones inoperante, en el CONAP que tendría un perfil más de gestión de proyectos formal; donde en primera línea tendría que salir a las instituciones, a las municipalidades, a la ciudadanía, a ver qué proyectos se necesitan en todo el territorio nacional y gestionarlos, formularlos y tenerlos bastante desarrollados para ir resolviéndolos en el tiempo; priorizándolos, por ejemplo, de urgente, menos urgente en el corto, mediano y largo plazo”, explicó el asambleísta. 

En una conversación que, previamente, había tenido Trece Noticias con el ministro de obras públicas y transportes, Mauricio Batalla, el jerarca vio con buenos ojos esta oportunidad para construir mejores carreteras. 

“No podemos seguir tomando créditos y endeudándonos continuamente de una manera irresponsable. ¿Qué tenemos que hacer? bueno, lo que tenemos que hacer es trasladar la responsabilidad al sector privado en conjunto con la administración pero decirle: venga sector privado, tenemos estos proyectos, venga, por favor, traiga su dinero, invierta, tenga una contraprestación a través de un peaje o a través de un mecanismo, obtenga sus recursos, por supuesto, pero no nos endeudamos y genérenos obra pública”, explicó el ministro. 

Justamente, en los últimos siete años, el Consejo Nacional de Vialidad ha perdido un 40% de sus ingresos; hecho que afecta, de forma directa, la construcción y conservación de las vías. 

“La única manera de que el país tenga grandes obras de infraestructura es a través de asociaciones público - privadas” anunció Batalla, quien aseguró que al país llegan muchas empresas, con cartel internacional, en busca de manejar puertos y construir; sin embargo, sí menciona que es fundamental madurar la cartera de proyectos. 

Este tipo de proyectos son, usualmente, pagados por los ciudadanos en forma de peajes, hecho que podría ser contraproducente para el costarricense; sin embargo, el diputado Vargas asegura que son proyectos que no se pueden postergar más. 

“Hemos ido haciendo proyectos ya no sólo urgentes, ya hay que hacerlos porque sí, entonces vamos muy botados en el desarrollo de infraestructura. Esa priorización nos va a ayudar a no tener que ser tan desfasados en los tiempos. Esta negociación bancaria, de condiciones, debería darnos competitividad o competencia para que los proyectos, realmente, se puedan negociar con la parte bancaria, con plazos importantes y que el costo que pague el ciudadano, que al final sí va a tener que pagar un costo de peajes y demás, sea diluido en el tiempo”, detalló Vargas. 

Tanto el diputado como el ministro coincidieron en que este tipo de inversión público privada podría agilizar no sólo carreteras sino que también cárceles, educación, puertos y otro tipo de proyectos.