Cuidadoras de la fundación Manos Abiertas niegan las supuestas agresiones o torturas
Las trabajadoras se reunieron con miembros de la junta directiva de la fundación Hogar Manos Abiertas
Este viernes 60 trabajadoras de la fundación Hogar Manos Abiertas se reunieron para valorar cuál será su situación, luego del allanamiento que realizó el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la fiscalía por supuestas agresiones, malversación de fondos, peculado y trata de personas con fines de explotación laboral que se cometían en la ONG.
Algunas de ellas detallaron a este medio que están preocupadas por la condición de los niños y de los adultos mayores, aseguraron que en sus años de laborar allí, nunca vieron agresiones o torturas.
Lusmy Mejía, Enfermera del programa de menores de edad aseguró que nunca se hubiese quedado a trabajar en una organización que violentan los derechos de los niños “si yo me quede en la institución fue porque nunca presencié algún acto de violencia hacia un menor de edad” .
Además, están preocupadas por lo que pueda pasar con los niños, “Mi preocupación más grande son los menores de edad, que quedaron en manos de personas que no los conocen, no saben el rol de cuido hacia ellos” dijo Lusmy Mejía, Enfermera de la fundación.
Maura Gómez trabajó 11 años como cuidadora de adultos mayores y negó que se cometieron agresiones “El martes que llegaron, fue duro, algunos de los adultos mayores le dijeron a los policías ese era su hogar, que se sentían bien, iban llorando y tristes”
El OIJ encontró dentro de las instalaciones ₡171 millones y casi $8.000 en efectivo, así como 133 señales de tránsito del Mopt, Edgard Rodríguez, miembro de la junta directiva dijo que ellos desconocían de ese dinero y esas señales “lo desconocemos, en la junta directiva nunca se nos informó, se nos ocultó toda esa información, normalmente los estados financieros que revisamos eran de los movimientos en las cuentas bancarias todo normal, esto pareciera ser de otro movimiento paralelo”
A dos de las supuestas monjas falsas les dictaron seis meses de prisión preventiva, otra quedó con arresto domiciliario y el hombre con medidas cautelares.
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